Entregarle un buen servicio de administración de edificio a la comunidad implica ser proactivo, dar respuestas oportunas, anticiparse a los problemas y ser propositivo con las directivas de las comunidades.

En 1998, este abogado se dio cuenta que había una importante falta de profesionalismo en la labor de los administradores de edificios y sintió la necesidad de mejorar este servicio.

“Cualquier persona puede ser administrador de edificio hoy día, la normativa ni siquiera exige estudios básicos, ni certificado de antecedentes, por ejemplo”, señala Zeltzer.

Administración de edificio: eficiencia certificada

En sus inicios se unió a dos amigos, un abogado y un arquitecto, y crearon BECZA Gestión Limitada, empresa que hoy tiene 18 años de funcionamiento ofreciendo un servicio rápido y eficiente en administración de condominios.

Para Daniel Zeltzer, es fundamental para el trabajo de un administrador conocer la ley de copropiedad y velar por el cumplimiento de todas las materias que están normadas, por ejemplo, sobre certificación de gases y calderas, o las normas ambientales vigentes.

El servicio de administración de edificio es más que gestión y mantención

La oficina de administración que encabeza, tiene un servicio de supervisión 24 horas, un departamento de Recursos Humanos y un Departamento de Gastos Comunes (el cual cuenta con el apoyo de Miconserje) que entrega la información en línea.

También indica que para llevar a cabo una excelente gestión se debe contar con un personal capacitado en resolver de forma eficaz los imprevistos que se pueden presentar en las comunidades.

Para Daniel, estos 18 años conllevan muchas historias. Por una parte, ha visto cómo se han creado algunas comunidades, ha visto crecer familias, y formado vínculos de mucha confianza. Por otro lado, comunidades que ha perdido, pero que luego de un tiempo ha vuelto a retomar.

La clave para una buena administración de edificio

Zeltzer cree que para ejercer una buena administración es necesaria la dedicación. Los estudios de todas las normativas relacionadas con las comunidades. Espíritu de superación, para no decaer con todos los problemas con que se trabaja, ya que “este trabajo es de constante conflicto”.

Además, las satisfacciones no se expresan, es decir, ante las buenas soluciones no hay agradecimiento, en cambio, al más mínimo problema, la manifestación es inmediata. Para Daniel “los edificios son el reflejo de la sociedad misma”.